SEGA trae de vuelta una de sus franquicias más icónicas para celebrar el vigésimo aniversario de la misma con un título que recopila las tres primeras entregas lanzadas en consolas de sobremesa, Super Monkey Ball: Banana Mania. En él encontraréis circuitos de Super Monkey Ball, Super Monkey Ball 2 y Super Monkey Ball Deluxe, con diversas mejoras gráficas, contenidos y personajes invitados de la compañía que harán las delicias de los aficionados y que podréis conocer en nuestro análisis.
Su historia se centra una vez más en AiAi y sus amigos, que disfrutaban de un día tranquilo hasta que el malvado Dr. Bad-Boon aparece para robarles todos sus plátanos. A partir de este momento comienza un viaje para recuperarlos en el que tenemos que rodar y rebotar por cientos de niveles y laberintos llenos de secretos y así evitar que haga saltar Isla Jungla por los aires. Una trama sencilla y bien narrada que hace que sea un título apto para toda la familia, con personajes simpáticos y mucho colorido. Por desgracia se han sustituido las escenas de los juegos originales por imágenes al estilo de los cómics que le quitan vistosidad. Se agradece, eso sí, que todos los textos nos lleguen en castellano.
En cuanto a mecánicas, Super Monkey Ball: Banana Mania es muy accesible al solo tener que desplazar a los monos que están en el interior de las bolas hasta la meta, inclinando el escenario para que echen a rodar. Pero no os engañéis, hay muchas trampas, saltos, caídas, rampas y caminos a recorrer que complicarán la tarea, siendo un verdadero reto completar todos los niveles y un desafío enorme conseguir todos los plátanos. Comentar también que se puede elegir entre el sistema de control actualizado o el clásico, así como comprar en la tienda un salto que podemos activar o desactivar en cualquier momento. Un aspecto que no nos ha acabado de convencer son las plataformas de salto, que hacen que se vuelva muy difícil controlar al personaje en el aire y nos ubiquemos bien.
Tenemos más de 300 niveles disponibles, perfectamente disfrutables hoy en día y con geniales diseños. La curva de dificultad está muy bien ajustada y pronto veréis como una propuesta tan sencilla puede volverse muy complicada, con montones de horas por delante para completar los circuitos y conseguir todos los plátanos. Junto a ellos hay doce personajes jugables, entre los que se encuentra AiAi y sus amigos, así como otros invitados de franquicias de SEGA como Sonic, Tales, Kiryu de Yakuza o Beat de Jet Set Radio. También hay consolas de la compañía y versiones retro de los personajes que se conseguían con la reserva, junto con algunos de pago, como Hello Kitty, Morgana de la saga Persona o Suezo de Monster Rancher.
Una vez finalizada la historia tenemos muchas modalidades extra disponibles. Dentro del Juego Principal está un Modo Desafío donde poner a prueba toda vuestra destreza y un Modo Práctica de Super Monkey Ball 1 y 2, así como un Modo Especial en el que ir desbloqueando nuevos niveles muy interesantes. Por otro lado está el Desafío clasificatorio para intentar conseguir los mejores tiempos y superar a jugadores de todo el mundo en las pruebas normales y los minijuegos, así como una lista de Objetivos que, al cumplirlos, nos otorgan más puntos.
Estos puntos después pueden invertirse en una Tienda para comprar personajes, atuendos para personalizar a los monos con partes para la cabeza, cuerpo, piernas y su bola, extras para el modo foto o incluso en algunas características especiales, como el salto o distintos renderizados que le dan un aspecto diferente a las partidas. También tenemos una Galería en la que ver los vídeos que hemos desbloqueado, escuchar la música del juego, ver las repeticiones guardadas o los créditos.
Pero el aspecto que más nos ha sorprendido son los Minijuegos de Super Monkey Ball: Banana Mania, en los que pueden participar de uno a cuatro jugadores de manera local. Aquí encontraréis varias disciplinas en las que competir: Carrera, Lucha, Objetivo, Billar, Bolos, Golf, Barco, Tiro, Pelea, Fútbol, Béisbol y Tenis. Son muy variadas entre sí y, en algunos casos, más profundas y divertidas de lo que en un principio puedan parecer, con la posibilidad de configurar muchos parámetros a nuestro gusto y varios niveles disponibles. Lo único que hemos echado en falta es poder jugarlos online, pero en general es una experiencia muy grata.
La duración del juego es tremendamente extensa, pero a todo ello hay que sumarle los diferentes modos, los minijuegos, la gran cantidad de extras a comprar en la tienda o la rejugabilidad que ofrece por intentar conseguir todos los plátanos y superar los récords de otros jugadores.
El apartado gráfico de esta remasterización no está nada mal, haciendo que luzca mucho más nítido y fluido que nunca, con escenarios que dentro de su sencillez resultan vistosos, variados y muy originales. Los personajes cuentan con animaciones simples, pero son muy expresivos y, si escogemos a alguna celebridad de SEGA, hacen que se cambien los plátanos por objetos característicos de los juegos de ese personaje en cuestión. Además tenemos un modo Foto con el que capturar algunos de los momentos de la aventura y varios filtros a nuestra disposición. Por poner una pega, diremos que la cámara a veces da problemas cuando salimos disparados por el aire.
En el sonoro tenemos una buena selección de temas que pueden volverse un tanto repetitivas por cada mundo, destacando en este sentido la melodía principal del juego. Los efectos no están nada mal y las pocas voces que encontraréis a lo largo de la aventura están en inglés, siempre acompañadas de textos en castellano.
Super Monkey Ball Banana Mania es, como conclusión, un gran homenaje para celebrar el vigésimo aniversario de la franquicia, con montones de niveles recuperados para la ocasión que ofrecen un desafío a la altura, muchas modalidades de juego, minijuegos divertidísimos, varios personajes entre los que elegir que incluyen invitados de otros juegos de SEGA y mucha rejugabilidad. Y no os dejéis engañar por su apariencia, es un título tremendamente desafiante en algunos de sus niveles, especialmente si queréis conseguir el 100%.
Un juego genial y divertido que a veces os causará frustración, pero que ha sabido mantener la esencia de la saga para ofrecer un producto muy completo que agradará a los aficionados o a aquellos que prueben la franquicia por primera vez.