ININ Games y la desarrolladora Tanuki Creative Studio nos traen un nuevo beat’em up de desplazamiento lateral al estilo de la vieja escuela con una estética de dibujos animados y una acción frenética y explosiva, Jitsu Squad. Sencillo de aprender pero difícil de dominar, este título se puede jugar en solitario o en cooperativo local para hasta cuatro jugadores. El juego llega a consolas PlayStation y Nintendo Switch el 9 de diciembre, debutando en Xbox en una fecha posterior.
Su historia nos habla de la legendaria Piedra Kusanagi, que contiene el alma de un poderoso demonio y puede otorgar poderes divinos a aquellos que la despierten. Ésta ha permanecido siglos oculta, pero ahora el malvado hechicero Origami, destructor de mundos y señor de la oscuridad, ha convocado a antiguos guerreros para encontrar la piedra, maldiciendo sus almas y convirtiéndolos en animales. Afortunadamente, un misterioso monje llamado Ramen logra salvar cuatro almas guerreras de la llamada de Origami: Hero, Baby, Jazz y Aros. Con el fin de detener al hechicero y recuperar la piedra, el Escuadrón Jitsu emprenderá un viaje lleno de peligros.
La trama de Jitsu Squad es tan sencilla como entretenida, estando contada mediante pequeñas conversaciones y escenas que sabrán sacaros una sonrisa. No esperéis nada demasiado especial, pero os enganchará con los múltiples homenajes que encontraréis al mundo de los videojuegos o del cine en cada uno de sus detalles. Eso sí, todos los textos del juego están en inglés, aunque no requiere un nivel alto para seguir el argumento.
Nada más comenzar encontraréis cuatro niveles de dificultad que se ajustan a la perfección al nivel de habilidad de cada jugador: Aprendiz, Guerrero, Maestro y Brutal. Cuanto más alta sea la dificultad, más cosas descubriréis, como nuevos ataques para los cuatro guerreros del Escuadrón Jitsu.
Sus mecánicas son muy accesibles, pudiendo desplazarnos en cualquier dirección, realizar un impulso, saltar, atacar formando combos, agarrar objetos y enemigos para golpearlos y lanzarlos posteriormente, ejecutar híper cadenas de combos o un poderoso contraataque si nos defendemos en el momento oportuno. Según el personaje que elijáis, estos movimientos varían de unos a otros con diferentes especialidades, contando incluso con un modo entrenamiento en el menú principal para ensayar los combos.
Una de las curiosidades es que, al derrotar enemigos, conseguimos experiencia en forma de pergaminos, pudiendo desbloquear nuevos movimientos a medida que avanzamos. Hay ataques ascendentes, descendentes o a distancia, entre otros. Pero lo más destacado en este sentido son los ataques especiales, capaces de acabar con grandes grupos con un solo movimiento, y las transformaciones, con las que nos ponemos una poderosa máscara que nos vuelve invencibles y con ataques súper poderosos por tiempo limitado. Para poder activarlos, antes tendréis que rellenar cierta parte del medidor especial.
De vez en cuando encontraremos cofres y otros objetos rompibles de los que obtener oro, vitalidad en forma de comida, latas que recargan el medidor especial, armas secundarias de uso limitado y, lo mejor de todo, poderosos aliados que os echarán una mano al coger su medalla. Son muy útiles, especialmente cuando hay grandes grupos rivales, e incluyen inspiraciones en personajes de otros videojuegos o invitados, como es el caso de Yooka Laylee.
En total encontraréis ocho niveles a superar en Jitsu Squad, cada uno con su propia ambientación y añadiendo nuevos enemigos con sus puntos débiles para hacer que la experiencia sea lo más diversa posible. En ellos encontraréis también jefes esperando al final de algunos. Estos son bastante desafiantes, teniendo que recurrir mucho al contraataque y a grandes combos si queremos derribarlos, con un gran elenco de movimientos y, sobre todo, una poderosa transformación que los vuelve invencibles temporalmente. Por si os parece poco, también encontraréis algunos niveles de bonificación en los que os tocará romper trozos de sushi al más puro estilo de los barriles de Street Fighter.
Como hemos comentado, el juego incluye un modo cooperativo local para hasta cuatro jugadores en el que cada uno de ellos podrá elegir a un personaje para competir contra el resto por obtener la mejor puntuación posible, ya sea acabando con el mayor número de enemigos, consiguiendo oro o ganando en los niveles de bonificación. En general es una experiencia más satisfactoria, aunque también es más caótica cuando se juntan tantos elementos y efectos en pantalla, echando en falta además el cooperativo online.
La duración de Jitsu Squad no es muy extensa y podréis completarla en pocas horas. Se agradece, eso sí, que al finalizar el juego se desbloquee un modo tag team, con el cual un jugador puede llevar hasta cuatro personajes, reduciéndose esta cantidad cuanto más jugadores participen. Hay que tener en cuenta que cada uno de los protagonistas cuenta con su propia experiencia, barra de especial y vitalidad, cambiando ésta al alternar entre personajes. Nos hubiera encantado encontrar tablas de clasificación online, las cuales le aportarían más vida al juego.
Un aspecto que no nos ha acabado de convencer es que si empiezas la historia en solitario y después quiere unirse un amigo no podrás hacerlo, teniendo que comenzar la campaña desde cero y sucediendo lo mismo a la inversa.
El apartado gráfico nos ha encantado, con personajes dibujados a mano perfectamente animados, escenarios variados llenos de montones de detalles y homenajes que os dejarán embobados mirando la pantalla, todo junto con efectos de gran calidad y funcionando de manera muy fluida para hacer que la jugabilidad no se resienta. La única pega que podemos ponerle en este sentido es que puede volverse un tanto caótico cuando se juntan cuatro jugadores. Por lo demás, nos ha parecido muy bueno y con muchas opciones de accesibilidad para que pueda ser disfrutado por cualquiera.
En el sonoro encontraréis varias melodías disponibles de buena calidad, destacando aquí el tema de Johnny Gioeli, a quien conoceréis por trabajar en algunas de las canciones de Sonic the Hedgehog. Los efectos están muy cuidados y las pocas voces que encontraréis en el juego, normalmente en las escenas, están únicamente en inglés, tal y como sucede con los textos.
Jitsu Squad es, en definitiva, un beat’em up muy entretenido y accesible, con controles intuitivos fáciles de aprender pero difíciles de dominar para superar las dificultades más altas del juego. Los niveles, los jefes y los personajes están muy cuidados, con una ingente cantidad de homenajes a los videojuegos clásicos y detalles que os sacarán una sonrisa. La única pega que podemos ponerle es que se nos ha hecho demasiado corto, no encontrando demasiados alicientes que nos inviten a rejugarlo una y otra vez.
Aún con su escasa duración, estamos ante una aventura que encantará a aquellos que disfrutaron de los clásicos arcade, notándose mucho el esfuerzo de la compañía por intentar replicar las sensaciones de la época.